Estas son muy buenas noticias para los que duermen de lado. En realidad, acostarse en esta posición trae un gran número de ventajas. ¿Sabías que reduce el reflujo ácido y la presión sobre la espalda? Pero necesitas hacer algunos ajustes menores para lograr un sueño placentero. Aquí, cinco consejos para lograrlo.

Consejo 1

Asegúrate de que la almohada que usas llene el vacío.

Nos referimos a la grieta entre el cuello y el colchón. Si tu almohada no tiene la altura adecuada, hay una gran posibilidad de que despiertes con un molesto dolor en el cuello.  Es decir, debe ser lo demasiado suave y firme. Por esta razón la mejor opción son las almohadas de espuma, ya que se ajustan a la forma de la cabeza, los contornos del cuello y rellenan cualquier espacio negativo.

Consejo 2

Asegúrate de que tu cabeza tenga una posición neutra

Básicamente, esto significa que tu cabeza no debe estar demasiado inclinada hacia delante sobre la almohada o demasiado caída hacia atrás. La forma más sencilla de mantener el cuello en la posición indicada es usando una pequeña almohada en forma de U.

Consejo 3

Ubicar una almohada entre las piernas

Esto ayuda a aliviar la presión sobre las caderas y la zona baja de la espalda, también mantiene su columna vertebral en la alineación indicada.

Consejo 4

Asegúrate de que el colchón que uses este ubicado en el lado más suave

Lo más recomendable en el momento de dormir de lado es optar por un colchón que sea más flexible y suave. ¿Por qué? La razón es sencilla, un colchón de este tipo es mucho más  adecuado cuando se trata de las curvas de tu cuerpo. Los colchones demasiado firmes o rígidos pueden causar una molesta sensación de rigidez al despertar.

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Fuente: http://www.purewow.com/wellness/tips-for-side-sleepers