El robot humanoide que rescata tesoros submarinos
Hace varios meses, el profesor Oussama Khatib, de Stanford, lideró un equipo de investigación con el objetivo de rescatar los del buque “La Lune”, de Luis XIV, el cual se hundió en el siglo XVII.
Hace varios meses, el profesor Oussama Khatib, de Stanford, lideró un equipo de investigación con el objetivo de rescatar los del buque “La Lune”, de Luis XIV, el cual se hundió en el siglo XVII. Para esto, en vez de hacer uso de los tradicionales submarinos, desarrollaron un robot submarinista que hacia el trabajo mucho más fácil.
Se trata del OceanOne, un robot submarinista que aprovecha lo mejor de los vehículos operados por control remoto y las ventajas que tienen los robots humanoides, como es el caso de contar con una mano robótica con la que se puede rescatar objetos como si lo hiciera un humano.
Uno de los problemas con estas máquinas, es la poca destreza y grados de libertad en sus brazos. Es por ello que en un trabajo en conjunto entre los investigadores de Stanford y la universidad de Ciencia y Tecnología King Abdullah, en Arabia Saudí, desarrollaron al OceanOne.
Entre las ventajas de este robot, es su tamaño el cual es más pequeño que los habituales, pero, la electrónica está inmersa en aceite, cuestión que permite al robot sumergirse a profundidades de hasta 2000 metros.
Gracias a los ocho propulsores con los que cuenta, el OceanOne puede moverse en todas direcciones y permite una maniobrabilidad bastante sencilla. También, cuenta con un sistema autónomo que hace que su funcionamiento se estable ante posibles problemas.
Lo realmente importante recae en sus brazos, los cuales tienen sensores de fuerza y presión que permiten coger objetos tanto pesados como frágiles de la manera correcta. Esto en particular permitió que el OceanOne rescatara una vasija del barco sumergido.
Debido al sistema de telepresencia se facilita su control remoto, y sus desarrolladores consideran que el invento podría revolucionar a este tipo de investigación y todo tipo de rescates submarinos.
Fuente xataka.com