Los zapatos de cuero son imprescindibles en nuestros armarios; son fabulosos, pero es toda una tarea cuidarlos adecuadamente porque se trata de un material muy delicado.

Así que, estos consejos aplican para todos tus zapatos de cuero y también puedes considerarlos al momento de comprar este tipo de calzado (sandalias, botas, tacones) porque son piezas en las que vale la pena invertir pues nos pueden durar un largo tiempo.

Tip #1

Protege los zapatos de cuero tan pronto como los sacas de la caja. ¿Cómo? Limpia tus zapatos con una esponja caliente y luego agrega el producto de tu elección (bálsamo o cera de cuero): el primer lavado calienta el cuero haciéndolo más poroso y mejorando la capacidad para absorber el producto; después utilizando una tela suave y limpia, frota pequeñas cantidades de este bálsamo encima del material hasta que quede completamente seco.

Asegúrate de hacer una prueba en un área discreta del zapato antes de aplicarlo en toda la superficie.

Tip #2

Una de las mejores cosas que puedes hacer para que tus zapatos “descansen” es que tras un día completo con ellos puestos, déjalos respirar durante 15 minutos antes de guardarlos. También debes acondicionar el cuero para mantener el brillo, aplicando de vez en cuando un acondicionador en crema con un paño de algodón y con movimientos circulares y después de 20 minutos (para que se absorba el producto) frota con un cepillo de zapatos para eliminar cualquier exceso del producto.

Tip #3

Si tus zapatos se mojan (si quedas atrapada (o) en una lluvia torrencial), quita el exceso de humedad con una paño y déjalos secar completamente con luz natural antes de guardarlos y por nada del mundo se te ocurra dejarlos cerca de fuentes de calor porque se puede romper el cuero.

Tip #4

¿Alguna vez has experimentado un minuto de paz en el que se te da por mirar hacia abajo y encuentras una mancha en tus zapatos de cuero? O ¿crees que ya es tiempo de limpiarlos?

Pues de ser así, humedece un trapo en una solución (1 parte de vinagre + 1 parte de agua) y con movimientos circulares, limpia suavemente el cuero procurando no saturarlo. Otra solución para las manchas, es mezclar algunas gotas de tu jabón de manos en agua tibia y frotar la mancha hasta que se quite; después limpia el resto de espuma y deja secar en un lugar fresco antes de volverlos a usar.

Tip #5

Para los zapatos con menor superficie de cuero (sandalias) y que han perdido su brillo, puedes empezar limpiándolos con un paño seco para retirar el polvo y la suciedad; a continuación aplica betún (color similar o igual al de tu calzado) con una tela sobre el material junto a movimientos suaves y circulares y deja secar durante media hora. Finalmente utiliza un cepillo para pulir el betún y otro paño para agregarle brillo.

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