La mayoría son vírgenes y aun más de entre ellos tienen iPhones. Y entre los hombres, es más probable que tomen LSD a que fumen cigarrillos.
Estos son los futuros líderes empresariales y políticos de Estados Unidos. O al menos, son los más nuevos aspirantes a un título de Harvard, la universidad más rica del mundo y cuna de la élite estadounidense.
Y si te preguntas si debemos confiar en ellos, casi uno de cada cinco hizo trampas en exámenes o tareas cuando estaban en el colegio.
Los hallazgos son de un sondeo anual de nuevos estudiantes universitarios publicado en el periódico Harvard Crimson, que estudió sus antecedentes, creencias, preferencias y visión política. Estos jóvenes estadounidenses crecieron en el nuevo siglo. Y muestran una mezcla de valores tradicionales, políticas liberales y tecnología digital. La mayoría de ellos tienen creencias religiosas y son grandes usuarios de redes sociales.
El análisis muestra una demografía cambiante. De los inscritos este año, un 56% son blancos, la menor proporción en años recientes.
Los siguientes en cuanto a presencia son asiáticos, hispanos y afroestadounidenses.
Casi dos tercios son vírgenes, y dos de cada cinco no beben alcohol.
Entre los estudiantes religiosos, los judíos y los católicos son los que tienen menos probabilidades de llegar vírgenes a la universidad, y quienes más probabilidades tienen son los musulmanes y los mormones.
El sondeo muestra la continua prevalencia del cannabis, que utilizan un 25% de los nuevos estudiantes.
Y quienes han ido a colegios privados tienen más probabilidades de haber experimentado con drogas, incluida la cocaína.