Profesionales, estudiantes, adultos en edad productiva, estudiantes preescolares, todos, estamos expuestos a situaciones que nos resultan extremadamente incómodas y que producen una sensación general de malestar físico, resequedad en la boca, visión nublada, sonrojamiento, dificultades para respirar y transpiración en todo el cuerpo. Todas estas sensaciones son muestra de que te encuentras pasando por un episodio de ansiedad.
Experimentar sensaciones propias de la ansiedad es normal en la medida en que son reacciones esperadas cuando las personas deben responder a situaciones desafiantes en la vida cotidiana. La ansiedad empieza a ser negativa en la medida en que los síntomas se experimentan cada vez mas intensos y sin razones o situaciones que ameriten la reacción o cuando los episodios de ansiedad se prolonguen por mucho tiempo. Como consecuencia, el cuerpo se desgasta porque se encuentra en una situación de vigilancia innecesaria y las manifestaciones de este desgaste conllevan afectaciones en el sistema inmunológico, en el sistema digestivo y cardiovascular, alteraciones del sueño e incluso, dermatitis.
El tratamiento de la ansiedad incluye terapias psicológicas, en algunos casos, requiere medicación y en todos los casos exige el aprendizaje de técnicas de regulación emocional en las que el manejo de la respiración es fundamental.
Las técnicas para el manejo de la respiración se fundamentan en observaciones científicas que demuestran que los ciclos de la respiración disminuyen los síntomas de la ansiedad porque permiten que la persona pueda procesar información a nivel cerebral y ofrezca respuestas adaptativas, regidas por la reflexión y no solo por el despliegue sensorial.
Si bien, se ha demostrado científicamente el beneficio del manejo de la respiración en el control de la ansiedad, es necesario reconocer que las técnicas vienen de la práctica regula del yoga y del canto profesional. En efecto, tanto el yoga como el canto profesional requieren que se modifique conscientemente el ritmo de la inspiración / expiración, la profundidad de la inspiración, la regulación de la actividad osteo muscular para permitir el ingreso, mantenimiento y egreso del aire.
Así las cosas, el yoga y la práctica del canto a nivel técnico y profesional se constituyen en técnicas subsidiarias para el adecuado manejo de los cuadros de ansiedad.