- No juegan el juego de la culpa.
Cuando hay un error, las personas exitosas no señalan con el dedo a alguien más. Ellos se hacen responsables y dueños de hasta el error. En lugar de jugar el juego de la culpa, que ya están trabajando para asegurarse de que no repitan el error.
Como dijo una vez Steve Jobs, “Las personas son lo suficientemente locas como para cambiar el mundo” En el camino que están obligados a cometer errores. La gente como Jobs no anda jugando el juego de la culpa.
- Son de mente abierta.
Los ricos están constantemente en la búsqueda de ideas nuevas e innovadoras para hacer su negocio más grande, mejor y más fuerte. Si no están abiertos a las nuevas ideas de los miembros del equipo, no van a ser capaces de adaptarse a los cambios que constantemente se lanzan en ellos.
- Están dispuestos a tomar riesgos apropiados.
¿Cree que Warren Buffett se hizo rico por siempre jugando a lo seguro? Los ricos entienden la importancia de salir de su zona de confort y tomar un riesgo. Sin embargo, los riesgos tienen que ser calculados. Los ricos primero examinan los pros y los contras antes de acceder a un nuevo acuerdo. Mientras que los ricos están en busca de nuevas oportunidades para aumentar sus ganancias, no están dispuestos a apostar todo en un acuerdo que podría costar su empresa. Buffett, nunca se invierte en un negocio si él cree que hay alguna posibilidad de fracaso.
- Establecen metas realistas.
Las personas más exitosas en el mundo saben exactamente lo que quieren y cómo llegar hasta allí. Ellos son capaces de llegar a su destino porque han establecido metas realistas que documentan.
Tome una página del libro de Jeff Bezos. “Hemos tenido tres grandes ideas en Amazon que hemos pegado durante 18 años, y ellos son la razón y tenemos éxito: poner al cliente primero. Inventar. Y ser paciente. “Eso fue simple, pero eficaz, objetivos que han hecho de Amazon un éxito.
- Conocer la forma de resolver los problemas.
Las personas exitosas son excelentes solucionadoras de problemas es por eso que han alcanzado su nivel de riqueza. Vieron la oportunidad de solucionar un problema y tenía la capacidad de poner esa habilidad de resolución de problemas para trabajar. Incluso después de que la empresa ha puesto en marcha, continúan trabajando en la solución de cualquier problema que pueda surgir en su camino.
Mark Zuckerberg, por ejemplo, se dio cuenta de que la gente estaba preocupada por su privacidad cuando Facebook lanzó su función de suministro de noticias. Para aplastar cualquier preocupación, Zuckerberg hizo posible que los usuarios seleccionaran los niveles de privacidad.
- Puede capacitar a otros.
No seguimos individuos exitosos debido a su valor neto. Los seguimos porque son positivos y se preocupan por su negocio. También se preocupan por sus empleados y clientes ya que creen en lo que están vendiendo. Ese rasgo tiene una tendencia a ser contagiosa.
Como Bill Gates ha dicho: “Al mirar hacia adelante en el próximo siglo, los líderes serán la autonomía de los demás.”
- Son proactivos.
“Hay que actuar y actuar ahora.” – Larry Ellison
Los ricos no se sientan a esperar a que el éxito venga a tocar a su puerta principal. No es tan conveniente. Tuvieron éxito porque hicieron que suceda con la creatividad y la pasión.
- Son aprendices de por vida.
Sus días de aprendizaje no son más sólo porque usted se graduó de una universidad y tiene un diploma en exhibición para probarlo. Si bien es posible que no tenga que intervenir físicamente dentro de un salón de clases, las personas exitosas están constantemente aprendiendo nuevas habilidades y técnicas que le ayudarán a alcanzar nuevas metas profesionales y personales.
Como ha dicho Richard Branson, “El día que deja de aprender es el día que deje de vivir.”
- Ellos hacen preguntas bien pensadas.
Las personas de éxito son bastantemente buenas en la solución de problemas porque utilizan sus redes para encontrar soluciones. Ellos plantean las preguntas correctas a las personas adecuadas para resolver problemas.
- Ellos están dispuestos a alejarse.
A veces, un líder tiene que pronunciar la palabra “no”. No siempre es una palabra fácil de decir, pero eso es lo que separa a los ricos de todos los demás. Ellos son lo suficientemente seguros como para alejarse de las inversiones o socios de negocios que no están trayendo nada a la mesa.