A medida que el otoño avanza y la temperatura disminuye para darle paso a la época de invierno; es la oportunidad perfecta para cambiar la rutina del cuidado de la piel de tu rostro con este mini facial hecho en casa.
Vapor, exfoliante y mascarilla son tus aliados para que luego tengas una piel brillante; además puedes hacer de tu noche un momento más relajante junto con una copa de sidra y una acogedora manta…
Vapor facial de Romero & Clavos de olor
Podemos considerar el vapor algo esencial para nuestra piel porque abre los poros, suaviza la piel, aumenta la circulación y permite absorber mejor los aceites y cremas hidratantes.
Lo que necesitas:
– 1 cucharada de romero (fresco o seco).
– 1 cucharadita de clavo de olor.
– Olla con agua hirviendo.
– Tazón o recipiente de cerámica o vidrio.
– Toalla (lo suficientemente grande para cubrir los hombros, la cabeza y el tazón).
Comienza lavando muy bien tu cara para quitar cualquier exceso de “suciedad”; luego hierve agua en una olla y añade los clavos de olor y el romero. Posteriormente transfiere esta infusión a un recipiente que mantenga el calor e inmediatamente inclínate sobre el vapor colocando una toalla por encima de tu cabeza y hombros, que también cubra el tazón (manteniendo tu rostro a una distancia prudente del vapor para evitar quemaduras).
Exfoliante de Calabaza
Lo que necesitas:
– 1 taza de azúcar morena.
– ½ de especias de pastel de calabaza.
– ½ cucharadita de aceite o algunas cápsulas de vitamina E.
Combina todos los ingredientes en un recipiente y mezcla bien; luego aplica suavemente la mezcla alrededor de tu cara y el cuello, evitando el área de los ojos. Una vez que dejes reposar por unos minutos, enjuaga con agua tibia (recuerda que entre menor presión hagas, mejor).
Mascarilla de Arándanos y Vitamina C
Rica en antioxidantes, los arándanos son un poderoso ingrediente que tonifica e hidrata la piel; igualmente el yogurt y el jarabe de arce actuarán como calmantes para la irritación o la resequedad.
Lo que necesitas:
– Un puñado de arándanos frescos.
– 1 cucharadita de jarabe de arce (orgánico preferiblemente).
– 1 cucharadita de yogurt natural.
Mezcla los ingredientes en un tazón pequeño; posteriormente aplica con las yemas de los dedos sobre la cara y el cuello. Deja actuar durante 15 minutos y luego lava con agua tibia; después aplica una crema o aceite hidratante.