Con tanta variedad de artículos cosméticos en el mercado es difícil, primero saber cuáles son las indicadas para nuestro tipo de piel y segundo encontrar la o las bases de maquillaje ideales que nos funcionen en cualquier ocasión. Por lo mismo, hoy te enseñamos a identificar qué tipo de bases son además de las más buscadas; perfectas para cada tipo de piel…
PIEL GRASA
Este tipo de piel tiende a parecerse a la cáscara de la naranja; es decir, los poros son visibles grandes y abiertos. Están en toda la cara y no solo en la nariz como se suele pensar.
Las bases ideales son aquellas libres de aceites que por lo general tienen un acabado mate y de larga duración para evitar el hecho de tener que retocar y la piel se vuelva a ver o sentir grasosa.
PIEL SECA
Aunque estas personas no deben preocuparse por los poros abiertos, la desventaja es que tienen la piel aún más sensible todavía, especialmente en temporadas frías (invierno) porque falta humedad en el aire por lo que tiene un efecto craquelado y a largo plazo una mayor tendencia al envejecimiento temprano.
Para estas pieles lo mejor son las bases hidratantes, las BB cream o CC cream según tu preferencia, y lo importante es que no opaquen o que sean compactas ya que despejan el brillo.
PIEL CON ACNÉ
Si eres de las personas que tienen esta situación (que resulta incómoda), es probable que utilices base o corrector para cubrirlo, algunas de ellas con fórmulas que prometen ser mejor. Es posible, gracias a que algunos maquillajes evaden usar tantos químicos y optan por sustancias cada vez más naturales y que con el tiempo y los productos correctos ayudan a sanar este problema. Las bases con aceites no son recomendadas porque aumentan la producción de sebo, lo ideal es usar bases en polvo o líquidas, aunque las bases en crema unifican mejor donde la apliques para cubrir y disimular las áreas problemáticas.
PIEL SENSIBLE
Una de las más difíciles de tratar ya que esta se asocia con la inflamación ya sea visible o no por el uso excesivo o por reacciones alérgicas a ingredientes o fragancias como: zonas rosáceas, psoriasis…
Trata de mantener estos productos al mínimo; sin embargo puedes optar por bases con texturas suaves, cremosas y ligeras; de ingredientes naturales (minerales) e hipo alergénicas con el fin de tener una buena cobertura pero sin obstruir los poros y hacer daño a las capas internas de la piel.
